Cambie su contraseña a intervalos regulares (recomendamos que lo haga cada tres meses). Esto evita el acceso no autorizado a su buzón.
Asegúrese de que su contraseña no pueda adivinarse fácilmente. Utilice una contraseña que tenga al menos ocho caracteres y asegúrese de que contenga letras, números y caracteres especiales. Por ejemplo, utilice las letras iniciales de una frase con la que esté familiarizado: Normalmente, escribo 10 correos electrónicos al día. La contraseña sería "Ne10cead.".
No utilice su contraseña de GMX para otros servicios en línea. Elija una contraseña segura y diferente para cada servicio en línea.